Introducción
El término autoligado se refiere a brackets que incorporan un mecanismo de cierre, ya sea un clip, tapa o un mecanismo de compuerta que mantiene el arco en el interior de la ranura del bracket1-3.Fueron diseñados para eliminar las ligaduras tanto metálicas como elastoméricas, basándose en el concepto de que este sistema crearía un ambiente con menor fricción, permitiendo una mecánica de deslizamiento más eficiente que podría reducir el tiempo de tratamiento4. Dependiendo del mecanismo de cierre se pueden clasificar en pasivos y activos5,6 . En un sistema activo, el clip de ligadura ejerce presión sobre el arco de alambre, a diferencia del sistema pasivo donde existe un mecanismo de cierre que transforma la ranura en un tubo5.
El concepto de brackets de autoligado aparece en 1935, con el aparato Russell descrito por el Dr. Stolzenberg7, como un intento por mejorar la eficiencia clínica al disminuir el tiempo de ligado8,9. Durante las últimas décadas se ha desarrollado una serie de nuevos aparatos de autoligado que según sus autores, aumentaría su eficiencia. Otros, ya existentes, han sido modificados para adaptarse a los requerimientos de clínicos y pacientes10.
Se ha propuesto una lista de propiedades que idealmente, cualquier sistema de ligado debiera cumplir. Según Harradine, un sistema de ligado debería ser seguro y firme, asegurar el asentamiento total del arco al bracket, mostrar baja fricción entre el bracket y el arco, permitir alta fricción cuando sea requerida, demandar poco tiempo clínico, permitir colocar fácilmente elementos auxiliares, ayudar a mantener una buena higiene oral y finalmente, ser cómodo para el paciente11.
La principal ventaja que se propone para el aparato de autoligado es la disminución de la fricción durante el movimiento dentario, permitiendo que el diente se deslice más fácilmente sobre el arco, lo que permite el uso de fuerzas más ligeras11.
Al revisar la literatura se constata la existencia de una gran cantidad y diversidad de estudios que muestran resultados contradictorios. Esta situación genera confusión en los ortodoncistas respecto de la verdadera utilidad de este tipo de aparatos en la práctica clínica.
El objetivo de esta revisión es presentar de manera más estructurada y ordenada toda la información disponible respecto de los distintos aparatos de autoligado, ya sea activo o pasivo, comparando las cualidades entre sí y con los aparatos convencionales. Se discutirán además las consideraciones clínicas más relevantes.
Metodología
La revisión de artículos se realizó a través de PubMed MEDLINE y Epistemonikos. Se utilizó el término “Self-ligating brackets” obteniéndose un total de 518 artículos. Se agregaron 30 estudios adicionales que fueron identificados a través de otras fuentes. Se incluyeron ensayos clínicos, meta-análisis, ensayos clínicos aleatorizados y revisiones sistemáticas que compararan brackets de autoligado entre sí o con brackets convencionales en distintas situaciones clínicas. No se utilizó filtro en relación con el año de publicación. No se consideraron revisiones narrativas, ni artículos en los cuales no se pudo obtener el texto completo. Tampoco se consideraron artículos en los que se combinara los brackets de autoligado con otro tipo de aparatos, ni estudios que utilizaron brackets de autoligado linguales. Se eliminaron de la búsqueda igualmente los duplicados de estudios que se repitieran en ambas fuentes de búsqueda y estudios que no tuviesen relación al tema. Finalmente se utilizaron 96 estudios.
Como una manera de ordenar la información recopilada se dividirán los resultados en dos áreas. Primero se establecerán comparaciones entre los distintos brackets de autoligado pasivos y activos en distintas etapas de tratamiento y luego se realizará lo mismo entre brackets de autoligado y brackets convencionales en relación con diferentes aspectos clínicos. En cada una de las áreas se expondrá en primer término estudios tanto clínicos como in vitro y en segundo lugar se hará una referencia a las revisiones sistemáticas que hayan estudiado esos mismos aspectos clínicos.
Desarrollo
Brackets de Autoligado Pasivo v/s Activo
Los resultados fueron organizados en los siguientes aspectos del tratamiento:
Fricción
Estudios in vitro mostraron que los brackets de autoligado pasivo presentan menor fricción que los brackets de autoligado activo, por lo tanto, mecánicas de deslizamiento se ven favorecidas con brackets pasivos. Sin embargo, el diseño del bracket es un factor que debe ser considerado12,13.
Alineación y Nivelación
Un estudio comparó el tiempo requerido para alinear un apiñamiento moderado maxilar en el grupo incisivo obteniéndose como resultado que no existirían diferencias en solucionar el apiñamiento inicial14. Una revisión sistemática con meta análisis concluye que los brackets de autoligado activo parecieran ser más eficientes para la alineación inicial6.
Expresión de Torque
Los brackets de autoligado activo serían más efectivos en la expresión de torque que los brackets de autoligado pasivos15). Otros estudios concluyen sin embargo que la influencia de la ligadura o del mecanismo de cierre activo o pasivo es mínima y que la dimensión de la ranura es mucho más importante para la expresión del torque5. Las revisiones sistemáticas en este respecto muestran una pequeña diferencia en la expresión de torque entre los brackets de autoligado activos y pasivos16.
Brackets de Autoligado v/s Convencionales
Para una mejor comprensión, las diferencias entre brackets de autoligado, tanto activos como pasivos y brackets convencionales también serán expresadas en relación con los siguientes aspectos clínicos:
Fricción
Estudios, principalmente experimentales, muestran una diversidad de resultados, desde una fricción significativamente menor hasta un incremento significativo de la fricción 17,18. Henao y Robert en un estudio in vitro, compararon ambos tipos de autoligados con brackets convencionales. Utilizando tres arcos diferentes, observaron una diferencia significativamente menor en relación con la fricción en los brackets de autoligado pasivo con arcos 0.014”19. Burrow, en un estudio similar, concluye que la fricción y la deformación elástica reversible del alambre (binding) fue mayor en los brackets convencionales al usar ligaduras elastoméricas. La resistencia al deslizamiento fue menor en los brackets de autoligado pasivos20. Resultados similares obtuvieron Costa et al, quienes observaron una reducción en la fricción en brackets de autoligado pasivos21. Una revisión sistemática concluye que los brackets de autoligado, tanto pasivos como activos, producen una menor fricción solamente cuando se utilizan arcos redondos de bajo diámetro en arcos dentarios que ya han sido alineados previamente. Sin embargo, en maloclusiones severas, al utilizar arcos rectangulares, no se encontró evidencia suficiente para asegurar que en estos casos existiera una menor fricción22.
Alineación y Nivelación
Algunos estudios, principalmente de laboratorio, muestran que los sistemas de autoligado producen, debido a su baja fricción, un movimiento dentario significativamente mayor en esta etapa23. Sin embargo, otros estudios muestran que se pueden obtener resultados similares al utilizar brackets convencionales con ligaduras metálicas con una fuerza moderada 24. Por otra parte, algunos otros estudios concluyen que ambos sistemas de autoligado no serían más eficientes en la reducción del apiñamiento25,26.Resultados similares obtuvieron Ong et al. al comparar brackets de autoligado pasivo con brackets convencionales, agregando que la técnica de ligado es solamente un factor más entre los numerosos factores que pueden influir en esta etapa de tratamiento27. Contrariamente, Scott et al. y Abdul et al. señalan que los brackets convencionales serían más eficientes durante los primeros 4 meses al compararlo con brackets de autoligado pasivo28,29. Pandis et al. estudiaron el comportamiento de brackets de autoligado pasivos con brackets convencionales según la magnitud del apiñamiento mayor o menor a 5 mm, obteniendo como resultado que en grandes apiñamientos no había diferencia significativa, pero en apiñamientos moderados, los brackets de autoligado pasivo serían más eficientes en la corrección de este problema30. En cuanto al control y resolución de las rotaciones, los brackets convencionales demostraron tener el mejor control rotacional, seguidos de los brackets de autoligado activos y luego los autoligado pasivos31. Las revisiones sistemáticas32,33 señalan que existe controversia en cuanto a la alineación inicial en tratamientos con extracciones. Sin embargo, en casos sin extracciones los valores y la duración de la fase de alineación así como los cambios en la posición e inclinación de los incisivos fueron prácticamente idénticos en los pacientes tratados con ambos sistemas32. La eficiencia en la alineación ortodóncica ha mostrado poca diferencia entre los distintos tipos de aparatos fijos33.
Pérdida de Anclaje
Se comparó la pérdida de anclaje entre brackets convencionales y de autoligado pasivos, concluyendo que no existe diferencia en la pérdida de anclaje entre ambos34. Similares resultados se obtuvieron en varios estudios al comparar brackets de autoligado con brackets convencionales35-39. Las revisiones sistemáticas en relación con este aspecto concluyen que, tanto los brackets convencionales como los de autoligado, mostraron la misma pérdida de anclaje40 y que no se encontró evidencia que sugiriera que existe una diferencia significativa entre brackets convencionales y autoligados41.
Cierre de Espacios
Los estudios muestran que no se observa ventaja alguna para los brackets de autoligado en esta fase24 y que al comparar ambos sistemas de autoligado con brackets convencionales35-38, se observó la misma tasa de retracción canina. Al comparar brackets de autoligado pasivo con brackets convencionales ligados con ligaduras metálicas en cuanto al rango de cierre de espacio en masa, se observó que no existían diferencias significativas en la cantidad de milímetros en que se cerraban los espacios al mes42,43,44. Resultados diferentes obtuvo Burrow al comparar un bracket de autoligado pasivo con uno convencional, en donde se producía mayor movimiento en el cierre de espacios con brackets convencionales45. Las revisiones sistemáticas 32,33,46 en relación con este tema muestran que no existe una diferencia significativa. Respecto de la retracción en masa de incisivos y caninos, se concluye que el uso de brackets de autoligado no representa una mejoría en el cierre de espacios en comparación con los aparatos convencionales32. La eficiencia de la tasa de cierre del espacio ha mostrado poca diferencia entre los distintos tipos de aparatos fijos33 por lo tanto, los brackets de autoligado no muestran superioridad clínica en comparación con los brackets convencionales 46.
Expresión de Torque
Los brackets convencionales muestran un mejor control de torque que los brackets de autoligado, dado por la incapacidad de los brackets de autoligado para presionar totalmente el arco hacia el interior de la ranura47. Sin embargo, otro estudio, al comparar brackets convencionales con brackets de autoligado pasivos, concluyó que éstos parecen ser igualmente eficaces en la aplicación de torque a los incisivos superiores en comparación con los brackets convencionales en casos que requieran o no exodoncias 48. Las revisiones sistemáticas en relación con este tema concluyen que los brackets convencionales expresan mejor el torque en comparación con los brackets de autoligado16.
Cambios Transversales
Se ha propuesto que los brackets de autoligado tendrían un mayor efecto en relación con los cambios transversales al ser comparados con brackets convencionales49,50. Sin embargo, los estudios concluyen que, utilizando arcos transversalmente más anchos, no se encontraron diferencias en los cambios dimensionales del arco maxilar o cambios en la inclinación de incisivos y molares en ningún tipo de bracket, 49,50. Tampoco se pudo confirmar la modelación ósea a nivel vestibular usando brackets de autoligado pasivo o activos51. Otros estudios, al comparar brackets convencionales con brackets de autoligado pasivos, no encontró diferencias significativas con respecto a la dimensión transversal en el arco maxilar ni en ninguno de los parámetros clínicos periodontales52,53,54. La única diferencia significativa fue que los brackets de autoligado pasivos mostraron una mayor inclinación hacia vestibular de los molares superiores que los brackets convencionales52. Se han encontrado resultados diferentes en otros tipos de estudios, en donde al comparar brackets de autoligado pasivos con brackets convencionales, observaron que el mayor desarrollo transversal se da en el área de los premolares en ambas técnicas y es significativamente mayor con los brackets de autoligado pasivos55,56. En este mismo estudio, la distancia intercanina aumentó significativamente con los aparatos convencionales en comparación con los brackets de autoligado55. En otros estudios similares al anterior, el grupo de autoligado pasivo mostró un mayor aumento del ancho intermolar e intercanino56,57,58.
En relación con las revisiones sistemáticas, no existe evidencia que muestre una mayor eficiencia de los brackets de autoligado comparado con brackets convencionales para lograr una expansión en las dimensiones transversales46. Los cambios dimensionales del arco que se observan con brackets de autoligado y brackets convencionales parecen ser similares, con niveles idénticos de expansión intercanina33.
Reabsorción Radicular
Estudios in vitro han demostrado una reducción en el nivel de fuerza que ejercen para los brackets de autoligado activo al compararlos con brackets convencionales con ligadura metálica y elastomérica, concluyendo que esto podría disminuir los efectos adversos tales como reabsorción radicular asociado a niveles de fuerza elevados59. Sin embargo, al evaluar ensayos clínicos randomizados, estos muestran que la reabsorción radicular no depende del bracket utilizado28,60,61. Una revisión sistemática sugiere que los brackets de autoligado no superan a los convencionales en la reducción de la reabsorción radicular apical externa en incisivos laterales superiores e incisivos centrales y laterales mandibulares62. Sin embargo, los brackets de autoligado pueden presentar una ventaja en la protección del incisivo central superior, lo que aún debe ser confirmado por estudios de mayor calidad62. Otra revisión menciona que los resultados no fueron concluyentes en el manejo clínico de la reabsorción radicular63.
Tiempo Clínico
Estudios que han comparado el tiempo que requiere posicionar y remover ligaduras en brackets convencionales metálicos y cerámicos, y en brackets de autoligado activos y pasivos, han demostrado que para ligaduras metálicas se requiere en promedio 8 minutos por arco; en el caso de las ligaduras elásticas esto toma 2,3 minutos y para brackets de autoligado sólo se necesitan 0,7 minutos64. Otros estudios concluyen que los aparatos de autoligado pasivo proporcionan un sistema más rápido y eficiente de recambio de arcos, reportando un ahorro de tiempo de actividad clínica de 1,5 minutos aproximadamente por paciente65. Por el contrario, Harradine en su estudio, encontró que esta reducción del tiempo en un sistema de autoligado pasivo era escasa y de poca relevancia clínica66. Una revisión concluye que ambos tipos de brackets de autoligado parecen tener una ventaja significativa con respecto al tiempo sillón67.
Frecuencia de Controles
Debido a que el mecanismo de bloqueo de los brackets de autoligado no está sujeto a degradación biológica, como sí ocurre con las ligaduras elastoméricas, sería posible incrementar el tiempo entre controles de tratamiento64. En cuanto al número de citas necesarias para completar el tratamiento, algunos estudios señalan que los tratamientos realizados con brackets de autoligado pasivos requirieron entre 4 y 7 citas menos que aquellos con aparatos convencionales4,66. Por el contrario, otros estudios al comparar brackets de autoligado activo o pasivo con brackets convencionales, determinan que los sistemas de autoligado no reducen la cantidad de controles.68,69,70. Una revisión muestra que no existe una reducción en el número de citas en comparación con los brackets convencionales32 y otra menciona que, debido a la baja cantidad de estudios incluidos, no se pueden establecer conclusiones relevantes sobre el tema71.
Tiempo Total de Tratamiento
En relación con este aspecto algunos autores reportan que los casos tratados con aparatos de autoligado pasivo finalizaron, en promedio entre 4 y 6 meses antes que los convencionales4,66. Otros estudios que comparan brackets de autoligado activo con brackets convencionales, muestran que los casos terminaron en promedio 5.7 meses antes que los tratados con aparatos convencionales 72. Sin embargo, se señala que la disminución en meses del tratamiento no es estadísticamente significativa34. Sin embargo, otros estudios muestran que los aparatos de autoligado activo o pasivo no reducen el tiempo de tratamiento en comparación con los convencionales68,70. Una revisión revela que no existe una disminución en el tiempo total del tratamiento en comparación con los aparatos convencionales31 y otra indica que, debido al número limitado de estudios incluidos, no es posible fundamentar conclusiones sobre las diferencias entre ambos tipos de brackets71.
Comodidad para el Paciente
Al evaluar las molestias del paciente, comparando brackets de autoligado pasivo con brackets convencionales, los hallazgos no mostraron diferencias entre los pacientes durante los 7 días posteriores a la instalación de los aparatos con arco NiTiCu 0.014”73. Mismas conclusiones obtuvieron Rahman et al., quienes muestran que no existen diferencias significativas en la experiencia de dolor74.
Al comparar la experiencia del dolor en pacientes tratados con un sistema de autoligado activo con aparatos convencionales, no se encontraron diferencias entre ambos grupos con un arco inicial de NiTi 0.016”. Sin embargo, al evaluar el dolor asociado a la remoción de arcos NiTi 0.019x0.025” e inserción de arcos de SS 0.019x0.025”, se reportó una mayor experiencia de dolor en el grupo de los autoligado75. Resultados similares se obtuvieron al comparar brackets de autoligado pasivo con brackets convencionales al insertar o desinsertar arcos rectangulares rígidos, donde se vio mayor dolor en brackets de autoligado76. Otro estudio sí reporta diferencias al comparar brackets de autoligado pasivo con brackets convencionales en etapas iniciales con un arco NiTiCu 0.014”, encontrándose menor dolor en el grupo tratado con autoligados77,78, mismos resultados obtenidos por Pringle et al.79.Pero, cuando se aumentaba el diámetro del arco a un 0.016x0.025”, concomitantemente, se produce un aumento del dolor con los aparatos de autoligado77,78. Otros estudios reportan que no existe evidencia que demuestre una diferencia en la intensidad del dolor al comparar brackets de autoligado con brackets convencionales al evaluarlos en 4 horas, 24 horas, 3 días, 1 semana y un mes80.
En relación con la apariencia de los brackets, los pacientes prefirieron los brackets convencionales77. En cuanto al contacto del bracket con los labios, señalaron mayor molestia con los brackets de autoligado77.
Revisiones sistemáticas informan que el grado de malestar es mayor con los brackets de autoligado, aunque con diferencias que no son estadística ni clínicamente significativas32,33,81. Otras revisiones, debido a los pocos estudios incluidos, no llegan a conclusiones respecto de este tema71.
Higiene y halitosis
En relación con el acúmulo de biofilm, algunos estudios demostraron que los aparatos de autoligado presentaban mayor acumulación de patógenos periodontales21,82,83. Sin embargo, otros estudios no muestran diferencias, por lo que el diseño del bracket no parece tener una gran influencia sobre el acúmulo de biofilm o en la presencia de patógenos periodontales en la placa subgingival ni en la inflamación gingival84,85,86,87,88. Por lo tanto, los brackets de autoligado no difieren respecto de la colonización de Streptococus mutans o Lactobacillus en comparación con los aparatos convencionales88,89,90 y no tendrían ventaja sobre los brackets convencionales con respecto al estado periodontal y la halitosis91. En contraste con esto, un estudio indica que los brackets de autoligado comparado con brackets con ligaduras elastoméricas muestran una menor retención de biofilm, mejores parámetros periodontales y menos halitosis92,93.
Algunas revisiones sistemáticas concluyen que los brackets metálicos de autoligado acumulan menos Streptococus mutans que los brackets metálicos convencionales. Sin embargo, sugieren que estos hallazgos deben interpretarse en conjunto con las características individuales de cada paciente, como la higiene y los hábitos alimenticios94. Otros resultados muestran que los brackets de autoligado no superan a los brackets convencionales en promover una mejor salud oral81 y otros arrojan que no hay evidencia de una posible influencia del diseño de los brackets (convencionales o autoligados) sobre la formación de colonias y la adhesión de Streptococcus mutans1,95. En relación con la halitosis, las revisiones encontraron que los brackets de autoligado controlaban mejor el mal olor que los brackets convencionales96.
Discusión
Como se puede apreciar, luego de hacer esta revisión, se puede ver la gran variedad de resultados y conclusiones respecto de los brackets de autoligado, tanto pasivos como activos, y los brackets convencionales. Por este motivo se hace importante ordenar toda la información disponible para la toma de decisiones clínicas en base a la evidencia existente.
En relación con los estudios de los brackets de autoligado, se puede decir que su validez es cuestionable. Hay varios elementos a considerar cuando se lee este tipo de artículos. Como señalan Rinchuse et al., muchos de estos estudios son realizados in vitro, por lo que carecen de capacidad de simular la respuesta biológica del paciente y algunos de estos se enfocan solamente en una parte del tratamiento. Además, el rango de movimiento dentario con el que se trabaja es mucho mayor al que ocurre clínicamente8. Otro factor a considerar es que dependiendo del tipo de bracket, estos difieren en las dimensiones de la ranura, por lo que lo hace difícil de comparar con brackets convencionales8. Muchos de estos estudios difieren en las dimensiones del arco que se utiliza para hacer sus publicaciones, por lo tanto, también es difícil poder establecer conclusiones claras al respecto unificando todos los criterios.
Al evaluar las diferencias entre brackets de autoligado pasivo con brackets de autoligado activo en relación con la alineación y nivelación, los estudios clínicos muestran resultados contradictorios. La única revisión sistemática que se consultó concluye que los brackets de autoligado activos serían más eficientes en la etapa de alineación, pero agregan que se requieren más estudios para confirmar esos resultados ya que esta revisión consideró solamente tres estudios, en los cuales las diferencias encontradas entre ambos brackets no eran estadísticamente significativas6,14. Al comparar ambos brackets también en relación con la fricción concluyen que los brackets de autoligado pasivo tendrían ciertas ventajas, estos corresponden a estudios in vitro por lo que sería importante analizar los resultados con prudencia y teniendo en cuenta las consideraciones mencionadas anteriormente12,13. Lo mismo ocurre cuando se comparan estos estudios en cuanto a la expresión de torque. En relación a este último tema, una revisión sistemática muestra una pequeña diferencia en la expresión de torque5,15,16.
Al agrupar la información entre brackets de autoligado activos y pasivos con brackets convencionales, también se dan resultados contradictorios al comparar los distintos estudios clínicos en diferentes etapas de tratamiento y consideraciones clínicas. En cuanto a la fricción, una única revisión sistemática encontrada concluye que los brackets de autoligado producirían una menor fricción con arcos redondos de menor calibre en un arco dentario idealmente alineado, pero esta situación clínica se da en muy pocos casos17-22.
En cuanto a las etapas del tratamiento ortodóncico, en la alineación y nivelación no existirían diferencias significativas entre los distintos tipos de aparatos fijos23-33. Al evaluar la pérdida de anclaje no se encontró evidencia significativa que muestre alguna diferencia entre los distintos tipos de brackets, lo mismo al compararlos en el cierre de espacios24,32-46. En relación con la expresión de torque, los brackets convencionales tienen mejores resultados al compararlos con los brackets de autoligado16,47,48 y por último, al analizar la expansión transversal no existe evidencia que muestre una superioridad de brackets de autoligado comparado con brackets convencionales33,46,49-57.
Al evaluar otras consideraciones clínicas entre los brackets de autoligado con los brackets convencionales, igualmente existen resultados contradictorios en los distintos estudios clínicos. En cuanto a la reabsorción radicular sólo un estudio in vitro indica el posible efecto protector radicular de los aparatos de autoligado debido al menor nivel de fuerza ejercido en relación con su contraparte convencional. Sin embargo, los estudios clínicos muestran similitud respecto a la pérdida de volumen radicular en ambos tipos de brackets, así mismo, las revisiones sistemáticas concluyen que no se puede sugerir la superioridad de un bracket por sobre otro28,59-63.
Al comparar la eficiencia de ambos sistemas, sólo un estudio atribuye una reducción del tiempo de actividad clínica a los autoligados, la cual sería de poca relevancia clínica. Finalmente las revisiones sistemáticas mencionan que los aparatos de autoligado parecen tener una ventaja significativa con respecto al tiempo sillón, pero quedaría pendiente evaluar si esta diferencia es clínicamente relevante64-67.
Se atribuye a los sistemas de autoligado la ventaja de que el mecanismo de cierre se encuentra exento de degradación biológica, por lo cual, se podría incrementar el intervalo entre las citas. Sin embargo, al revisar la literatura en cuanto a la frecuencia de controles, los resultados son diversos y las revisiones sistemáticas muestran en general que no existe una reducción en el número de citas en comparación con los brackets convencionales4,32,64,66,68-71.
En relación con el tiempo total de tratamiento, algunos autores señalan una disminución en los casos tratados con autoligado, otros mencionan que esta reducción no es significativa y un estudio incluso reporta un mayor tiempo para los brackets de autoligado4,31,33,60,62-64. Sin embargo, las revisiones sistemáticas revelan que no existe una disminución en el tiempo total del tratamiento en comparación con los aparatos convencionales4,32,34,66,68-72.
Además en relación a la comodidad del paciente, existe un mayor malestar con los brackets de autoligado, pero que no es estadísticamente significativo32,33,71,73-81. Por último al analizar la higiene entre ambos brackets, al igual que los estudios clínicos, los resultados de las revisiones sistemáticas igualmente son contradictorios, unos concluyendo que no existen diferencias y otros que los brackets de autoligado acumulan menos Streptococus mutans, por lo que no se tiene una certeza clara en relación con este tema1,21,81-96.
Conclusiones
Luego de revisar la literatura disponible acerca de los brackets de autoligado podemos concluir que:
-Con respecto a la alineación, nivelación, fricción, cierre de espacios, pérdida de anclaje, cambios transversales, reabsorción radicular, frecuencia de los controles, duración del tratamiento, comodidad para el paciente e higiene y halitosis, los resultados muestran que no existe una diferencia significativa al utilizar brackets de autoligado o brackets convencionales, por lo que se requieren más estudios para avalar su relevancia clínica.
-En relación al tiempo de sillón falta evidencia para concluir que el uso de brackets de autoligado representa una disminución clínicamente relevante en el tiempo clínico, comparado con brackets convencionales.
-La principal desventaja del sistema de autoligado comparado con los brackets convencionales es que presentan mayor dificultad para expresar el torque.
-Existen muchos factores externos no controlables en relación con el movimiento dentario que pueden afectar la comparación entre brackets de autoligado y brackets convencionales.
-Estudios in vitro muestran resultados distintos a los estudios clínicos